La escritora japonesa Asako Yuzuki se vio sorprendida por el fervor que ha despertado su novela Butter (La Gula) fuera de Japón. Publicada en inglés y español el año pasado, la obra (una historia de asesinato y misoginia inspirada en el caso real de Kanae Kijima, la llamada “Viuda Negra”) ha vendido más de 610 000 ejemplares en el extranjero, con un impresionante tirón en el Reino Unido (400 000 copias), donde ha sido premiada y aclamada tanto por la crítica como por los lectores. Lo que en principio nació como un reflejo de la fascinación mediática por la apariencia de la supuesta asesina (etiquetada por los medios nipones como “poco atractiva” para ejercer de femme fatale) se ha convertido en un prisma para analizar las presiones sociales que sufren las mujeres en Japón.
A través de la correspondencia ficticia entre una periodista y la presa (renombrada Kajii en la novela), Yuzuki traza un relato en el que la cocina (y, en especial, la mantequilla) se erigen en símbolos de placer, culpa y resistencia. El apetito desatado por comidas hipercalóricas, desde un ramen cargado de mantequilla hasta el arroz generosamente untado, contrasta con la exigencia cultural de delgadez extrema y autocontrol femenino. Con un estilo directo y afilado, Butter no solo cuestiona la narrativa mediática sensacionalista, sino que se adentra en la raíz de la misoginia que impera en muchas esferas de la sociedad japonesa.
Origen de “Butter” y su inspiración real
Yuzuki se sintió obligada a escribir su novela tras observar cómo los medios japoneses enfatizaban aspectos superficiales del caso de Kanae Kijima, condenada a muerte en 2012 por envenenar a tres hombres contactados a través de sitios de citas. Más allá de los hechos criminales, el foco mediático recayó en la apariencia de la acusada y en su supuesta habilidad para “complacer a los hombres” con sus dotes culinarias. “Cuando estalló el caso, los medios recordaban principalmente que la sospechosa sabía cocinar y tomaba clases para ‘agradar a los hombres’. Eso me perturbó profundamente”, explicó la autora a la agencia AFP.
El fenómeno internacional de Asako Yuzuki
La traducción al inglés de Butter ha superado las ventas en Japón y ha cosechado premios en el Reino Unido, un logro poco habitual para una novela nipona contemporánea. El intenso interés occidental, tanto en el thriller psicológico como en su trasfondo crítico del patriarcado, ha convertido a Yuzuki en un referente de la literatura feminista global. La autora atribuye esta acogida al poder de la mirada extranjera: “Cuando los medios occidentales toman un tema, cambia completamente la percepción en Japón”.
Misoginia y roles de género en Japón
Japón ocupa el puesto 118 de 146 en el Informe de Brecha de Género 2025 del Foro Económico Mundial, un indicador de la permanencia de barreras estructurales para la igualdad. En política y en las salas de juntas, las mujeres son pocas y siguen sujetas a estándares de belleza inalcanzables. La presión social se manifiesta en una publicidad omnipresente de dietas, cirugías estéticas y productos adelgazantes, alimentando una cultura de “fatfobia” que penaliza cualquier desviación de la delgadez normativa.
La elección de la mantequilla como hilo conductor no es casual: un alimento rico y placentero, pero cargado de connotaciones negativas en un entorno obsesionado por la delgadez. En Butter (La Gula), las descripciones de platillos mantecados se convierten en un espejo de la tensión entre el deseo personal y la autodisciplina exigida a las mujeres. Yuzuki explora así cómo el acto de comer se politiza y se convierte en acto de resistencia, o en motor de culpa y vergüenza.
#MeToo y la dificultad de denunciar
A diferencia de otros países, en Japón el movimiento #MeToo no logró arraigar con fuerza y quienes denuncian discriminación o agresiones sexuales suelen quedar relegadas al papel de “activistas” en un sistema mediático que las consume sin protegerlas. El caso de la periodista Shiori Ito (quien acusó públicamente de violación a un conocido presentador de televisión) ejemplifica los obstáculos: su documental, nominado al Oscar, ni siquiera se estrenó en Japón al incluir pruebas obtenidas de forma clandestina o reservadas para procesos judiciales.
Yuzuki confía en que la atención internacional contribuya a impulsar reformas en la percepción y el trato hacia las mujeres en su país. “Si los medios europeos e ingleses siguen interesados en estos temas, quizás la situación cambie un poco”, afirma. Butter demuestra que la literatura puede convertirse en un altavoz global para denunciar desigualdades y presionar por un cambio cultural más profundo.
La historia real de la asesina Kanae Kijima

Kanae Kijima nació el 27 de noviembre de 1974 en Nakashibetsu, Hokkaido, Japón. Tras abandonar sus estudios en la Facultad de Economía de la Universidad Toyo, se trasladó a Tokio donde, bajo diversos alias como “Sakura Yoshikawa”, se presentaba en sitios de “konkatsu” (búsqueda de matrimonio) fingiendo ser una mujer adinerada e interesada en el matrimonio. Entre 2007 y 2009, sedujo a varios hombres con promesas de futuro en común, para luego envenenarlos con monóxido de carbono mediante yeontan (carbón vegetal comprimido) y apropiarse de sus bienes o extorsionar a sus víctimas antes de su muerte. Se le atribuyen con certeza tres homicidios y se la sospecha de otros cuatro fallecimientos igualmente sospechosos; tras la muerte en agosto de 2009 de Yoshiyuki Oide, cuyo fallecimiento inicialmente se clasificó como suicidio, la policía de Saitama reabrió el caso y la arrestó en enero de 2010 por cargos de fraude relacionados con la obtención de millones de yenes de sus pretendientes.
El juicio penal comenzó en enero de 2012 en el Tribunal de Distrito de Saitama, donde un jurado popular deliberó durante 100 días. El 13 de abril de 2012, el tribunal la declaró culpable de los tres asesinatos y de múltiples fraudes, imponiéndole la pena de muerte (siendo la primera mujer condenada a muerte mediante lay judges en Japón). Tras apelar la sentencia, la Corte Suprema rechazó su recurso en abril de 2017, confirmando así la condena capital, que permanece vigente mientras Kijima cumple prisión en el corredor de la muerte japonés.
- Yuzuki, Asako
- Ogihara, Yoko
- Cordobés, Fernando
Sinopsis de La Gula, de Asako Yuzuki
Rika Machida, la única mujer en la redacción de la revista semanal donde trabaja, logra algo que nadie más ha conseguido: establecer contacto con Manako Kajii, recluida de por vida tras haber seducido y envenenado a varios hombres para financiar sus clases de cocina y banquetes extravagantes. Ese primer intercambio marca el inicio de una serie de encuentros que pronto harán que el interés profesional de Rika se convierta en una atracción inquietante hacia la presa.
Lejos del estereotipo de femme fatale, Kajii cautiva a Rika con su carisma arrollador y su implacable voluntad de satisfacer sus antojos, eclipsando cualquier otro reportaje que la periodista haya cubierto. Conforme profundiza en la historia de la asesina, la influencia de su personalidad magnética trasciende los barrotes y acaba moldeando las propias decisiones y comportamientos de la investigadora.