En un giro de guion que nadie vio venir, Nintendo ha cerrado su esperadísima presentación Direct de ayer, 12 de septiembre, con un anuncio que ha sacudido los cimientos de la industria del videojuego: el regreso de la Virtual Boy. La mítica y controvertida consola de 1995, conocida tanto por su ambiciosa propuesta de 3D estereoscópico como por su estrepitoso fracaso comercial, volverá en la febrero de 2026 no como una consola independiente, sino como un ingenioso accesorio para la Nintendo Switch y la Switch 2.
Bajo el nombre de «Virtual Boy VR Kit», este nuevo periférico promete redimir uno de los capítulos más oscuros y fascinantes de la historia de Nintendo, adaptando la tecnología del pasado a las capacidades de su hardware más exitoso. El anuncio, presentado por Yoshiaki Koizumi, mostró un dispositivo que fusiona la icónica estética roja y negra con un diseño moderno y ergonómico, claramente inspirado en la filosofía de los kits de Nintendo Labo.
«Siempre hemos creído en la idea de ofrecer experiencias de juego únicas», comentó Miyamoto durante la presentación. «Con la Virtual Boy original, quizás nos adelantamos demasiado a nuestro tiempo. La tecnología no estaba lista y el precio era demasiado elevado para las familias. Hoy, con la potencia y la versatilidad de Nintendo Switch, podemos finalmente hacer realidad esa visión de una manera accesible y cómoda para todos».
El Virtual Boy, un fracaso adelantado a su época
Para entender la magnitud de este anuncio, es necesario recordar el contexto de la Virtual Boy original. Lanzada en 1995 a un precio de 179.99 dólares (una cifra considerable para la época, equivalente a más de 350 dólares actuales ajustando la inflación), la consola fue un desastre comercial. Su tecnología, que utilizaba un sistema de espejos y LEDs rojos para crear una sensación de profundidad tridimensional, era innovadora pero también su mayor lastre. Los jugadores se quejaban de dolores de cabeza y fatiga visual tras breves periodos de uso, y su paleta de colores limitada al rojo y al negro no pudo competir con el auge de las consolas de sobremesa con gráficos poligonales a todo color como la PlayStation de Sony y la propia Nintendo 64, que llegaría poco después.
La Virtual Boy fue descatalogada en menos de un año, con apenas 22 juegos lanzados en su efímera vida. Se convirtió en el mayor fracaso de hardware de Gunpei Yokoi, el legendario creador de la Game Boy, y en una mancha en el impecable historial de Nintendo. Sin embargo, con el paso de los años, ha adquirido un estatus de culto, vista por muchos como una pieza de hardware fascinante y una idea visionaria que simplemente llegó demasiado pronto.
Redención a través de la Nintendo Switch y la Switch 2
El nuevo «Virtual Boy VR Kit» parece haber aprendido de todos los errores del pasado. El accesorio consiste en unas gafas de diseño ligero en las que se acopla la pantalla de la Nintendo Switch (o la Switch 2). Utilizando la alta resolución y la tecnología de la pantalla actual, el kit emula el efecto 3D estereoscópico original, pero con una nitidez y estabilidad mejoradas. Además, Nintendo ha confirmado la inclusión de un «modo confort» que permite alternar la paleta de colores a una escala de grises, reduciendo la fatiga visual asociada al monocromatismo rojo del sistema original.
La sorpresa mayúscula llegó con el anuncio del catálogo: 14 de los juegos lanzados originalmente para la Virtual Boy estarán disponibles, incluidos clásicos de culto como Mario’s Tennis, Wario Land, Teleroboxer y Jack Bros. Estos títulos no serán simples emulaciones; se ejecutarán en una «resolución HD mejorada» y con controles adaptados a los Joy-Con, que podrán acoplarse a un soporte que imita la forma del peculiar mando de la consola de 1995.
El precio será uno de sus grandes atractivos. El «Virtual Boy VR Kit» saldrá a la venta a un precio de 99.99 euros, un coste significativamente inferior al de su predecesora y alineado con otros periféricos de la compañía. «Queremos que esta sea una puerta de entrada a la historia de Nintendo y a una forma diferente de jugar. No es nuestro dispositivo de VR principal, sino un homenaje y una segunda oportunidad para una idea que lo merecía», explicó Doug Bowser, presidente de Nintendo of America, en un comunicado posterior al Direct.
Un mix entre lo retro y el VR en la Nintendo Switch
El cardboard de cartón de la Virtual Boy para la Switch se venderá a 25 dólares.Este movimiento estratégico de Nintendo es doblemente inteligente. Por un lado, capitaliza la creciente ola de nostalgia retro, recuperando un producto fallido y convirtiéndolo en un accesorio deseable y asequible para su base de más de 140 millones de usuarios de Switch. Por otro, le permite seguir experimentando con la realidad virtual de una manera cautelosa y controlada, sin la necesidad de invertir en un costoso casco de VR independiente.
La compatibilidad con la Nintendo Switch y Switch 2 sugiere que este no es un experimento aislado. El «Virtual Boy VR Kit» podría ser el primer paso de una estrategia más amplia para integrar experiencias de inmersión sencillas en su ecosistema de hardware.
La noticia ha sido recibida con entusiasmo por parte de la comunidad. Las redes sociales se inundaron de reacciones, con miles de jugadores aplaudiendo la audacia de Nintendo para abrazar su propio pasado, incluso sus fracasos más notorios. Después de treinta años relegada a los museos y las estanterías de los coleccionistas, la Virtual Boy está de vuelta, no como una reliquia, sino como un testimonio de que en el mundo de los videojuegos, incluso las ideas fallidas pueden tener una segunda vida gloriosa.